Empresario Independiente o Empleado

Las Trampas de la Esclavitud (o de los jefes) Camuflada

Empresario Independiente es una expresión que se aplica a las personas con espíritu emprendedor que deciden asumir el control laboral de sus vidas.

Hace poco tuve una charla muy interesante con un empresario independiente. Bueno, al menos esa es la idea que tienen los que no son empleados al estilo tradicional y que emprenden por iniciativa propia… que pertenecen al staff del “empresario independiente”. 

¿Por que razón lo digo? Bien,  no me pude dejar de fijar en un punto muy interesante de nuestra charla, cuando me explicaba su negocio: la empresa con la cual se asocia para hacer su negocio de marketing en red no le permite desarrollar ningún otro proyecto de negocio relacionado a otra empresa, mientras esté asociado con ella. Inclusive me explicó que habían echado a un compañero suyo porque se habían enterado de que él desarrollaba dos proyectos simultáneos como empresario independiente. Y confeso que no ha sido la primera vez que oí semejante información de alguien que se denomina “empresario independiente”.

A ver, o me he perdido algo por el camino o pasa algo equivocado por aquí. Porque creo que empresario independiente se refiere a un emprendedor libre. Para decidir cual o cuantos proyectos quiere o necesita desarrollar para llegar adónde sea que quiera llegar.

Empresario Independiente – ¿Hasta que punto es un Emprendedor Libre? 

Pienso que en realidad,  lo que me quiso expresar el empresario independiente con el que me reuní, fue que la empresa había roto el contrato de agencia que compartía con su compañero. Pero, en realidad lo que más me sorprendió ha sido el empleo por su parte  del término echar y el recelo de que a él le pasara lo mismo (evidente en su expresión y comportamiento).

En primer lugar, no puedo aceptar que una empresa se otorgue el derecho de permitir o no a un empresario independiente tomar la decisión de emprender de tantas formas como quiera para tener el control laboral y económico de su vida. Tampoco puedo comprender que lo impida hacerlo bajo la amenaza de romper el contrato,  a tal punto que sus asociados se sientan como empleados, es decir, con recelo de que se les echen, aunque realmente no deberían ser tratados como empleados ya que no gozan de los derechos como tal.

Lo que sí puedo comprender es que se rompa un vínculo, mejor dicho, una relación comercial derivada de un contrato mercantil con el empresario independiente que en el Derecho español se define como un negocio jurídico bilateral que tiene por objeto un acto de comercio.  Pero todavía no me queda claro la razón involucrada en el proceso y ni tampoco la expresión echar. Un contrato se puede dar por terminado pero nadie puede ser echado en un acto de comercio, si no me equivoco.

Creo que no se puede poner en juego la libertad del empresario independiente de trabajar con los proyectos que le den la gana, siempre y cuando se mantenga ético en sus relaciones comerciales y cumpla con los requisitos legales. Cuando se le quita esa libertad, ya le están tomando el pelo, con el perdón de la expresión. Porque ha dejado de ser un empresario independiente y ha pasado a ocupar el puesto de empleado y a tener jefes… Sí, jefes. Porque si de parte de la empresa se otorgan el derecho de decidir cómo uno (que debería ser respetado como un empresario independiente) debe actuar respecto a su propia economía, es que entonces ha vuelto él a ocupar el puesto de empleado pero sin derechos laborales. Y eso es una esclavitud camuflada.

Empresario Independiente – El Contrato Mercantil

Cuando un empresario independiente decide empezar una relación comercial con una empresa bajo la firma de un contrato mercantil o de agencia, en realidad se convierte en un trabajador autónomo a los ojos de la ley. Y como trabajador autónomo, un empresario independiente está obligado a darse de alta en las instancias gubernamentales debidas, como hacienda y seguridad social.  Para hacerlo todo dentro de la legalidad, lo debe hacer desde que empieza su actividad laboral o vínculo con cualquier empresa a través de un contrato mercantil o de agencia.

Subrayando las palabras de A. Carlos González, profesional del sector de Inversión, Finanzas y Gestión comercial,  el contrato mercantil no trae beneficio al empresario independiente y si única y tan solamente a la empresa con que colabora, una vez que ella se vale de tal forma de contratación con el principal objetivo de no generar gastos y eludir responsabilidad.

Entretanto, Gonzáles todavía aclara que si uno empieza una actividad como empresario independiente en un sector que domina bajo un contrato de agencia, tiene la probabilidad de generar altos ingresos, de manera que en tal caso, ese puede ser un modo excelente para que uno empiece en los negocios , “…siempre y cuando no te limiten a un solo producto o una sóla empresa.”, afirma González.

De hecho, a mí me ha llamado mucho la atención la expresión: “siempre y cuando no te limiten a un solo producto o una sóla empresa” y creo que todo empresario independiente lo debería tener seriamente en cuenta.

Empresario Independiente – Hay que Ganar en Experiencia

Yo pertenezco a esa clase de emprendedores, en la que uno se reconoce como empresario independiente y llevo más de un proyecto de negocio a la vez, sin que uno interfiera en el otro. De hecho no solo es viable como es práctico porque cuando hago contacto con mis prospectos identifico cual de mis proyectos se les encaja mejor.

Aunque me dirija a un público objetivo en específico, las necesidades y  las posibilidades individuales cambian de persona a persona. Así que cuando hacemos contacto con nuestros prospectos, nada más razonable que identificar lo que más se ajusta a ellos, a sus necesidades  y ofrecerles el proyecto de negocio más adecuado.

El espíritu emprendedor no puede ser frenado y tampoco limitado.  El sistema empresarial tradicional que nos condujo hacia la situación económica negativa que afecta hoy el mundo entero está basado exactamente en una estructura diseñada para enseñar a la gente a no creer en sus propias capacidades y seguir manteniéndolas bajo su control  y siempre ha hecho lo posible para sofocar y limitar la capacidad emprendedora de las personas en su propio beneficio.

Así que un empresario independiente, una vez haya asumido ser independiente, no se debería permitir limitar por empresas que todavía siguen con el mismo pensamiento embarrador que condujo el mundo a la bancarrota económica con la cual lidiamos hoy y que todavía presumen poder quitarle a ese mismo empresario independiente su libertad de decidir cómo quiere él controlar su vida y ampliar sus posibilidades de desarrollo económico.

Empresario Independiente – Elegir correctamente

Todo emprendedor que quiere empezar en el mundo de los negocios como empresario independiente, antes de decidirse por colaborar con una empresa, debería fijarse si le impone esta algún impedimento respecto a desarrollar negocios con otras empresas en simultáneo. Si de eso se trata, creo que haría mejor en buscar a otra empresa que le respete como empresario independiente y no se le imponga esa clase de restricción.

Hay un sin número de empresas serias, idóneas y respetables en el mercado de entre las cuales el nuevo empresario independiente puede elegir, sin precipitarse, para empezar su negocio. Es evidente que las mejores opciones se encuentran entre las que no limitan su capacidad y potencial y tampoco pretenda gestionar la forma como quiera generar la economía que se propone.

Así que mi consejo a todo empresario independiente es: investígalo antes de tomar una decisión. Asume de verdad el control de tu vida, porque en el futuro, cuando te hagas con más experiencia en los negocios, seguramente querrás diversificar tus fuentes de ingreso (un secreto de los que logran la libertad financiera) y habrá mucho en juego si la empresa con la cual te asociaste no te lo permite.